Has decidido que quieres comprar una moto. No sabes exactamente qué modelo será, pero lo que tienes claro es que no quieres hacer una mala compra.
En MotoShare estamos encantados de ayudarte a encontrar la moto adecuada para ti. Para determinar cuál es la que mejor se adapta a tus necesidades, hemos hecho una lista de pasos a comprobar para encontrar la moto perfecta para ti.
Empecemos con el presupuesto. El presupuesto es un factor determinante a la hora de comprar una moto. Una motocicleta puede satisfacer todas tus necesidades pero, si no puedes permitírtela, soñar con ella es una pérdida de tiempo y energía. Por lo tanto, empecemos por tener claro el presupuesto límite antes de seguir con en el resto de los requisitos.
Dentro del presupuesto se deberían contemplar también los costes extra que vienen después de la compra; los costes anuales, por ejemplo, como el mantenimiento, impuestos, seguros… pueden subir fácilmente entre 500 a 1000 euros al año. Este punto te interesa especialmente si estás considerando comprar una moto muy económica; normalmente, las motos baratas son más antiguas y suelen acarrear más costes de mantenimiento.
¿Tienes un presupuesto demasiado pequeño como para comprar una moto decente? Considera la posibilidad de alquilar una moto o, si ya has invertido en una, alquila ocasionalmente tu moto para recuperar la inversión.
Con una búsqueda intensiva por portales de internet y requisitos bien claros, puedes encontrar fácilmente una buena motocicleta de segunda mano por menos de 1000 euros. A menudo son modelos más antiguos, o vehículos que necesitan una actualización. Las motos económicas de segunda mano son una buena opción para trayectos cortos o si las necesitas por un período de tiempo puntual. Las marcas que se mueven por estos umbrales de precios incluyen Suzuki o Kawasaki.
Para este presupuesto la oferta ya es mucho mayor y se pueden incluir más requisitos en la compra. Se pueden encontrar modelos de segunda mano de la mayoría de marcas por este presupuesto, aunque la condición y la antigüedad variará según la marca, siendo común encontrar modelos de finales de los 90 y principios de los 2000.
Este es el segmento con opciones más decentes. Normalmente es fácil encontrar modelos de casi todas las marcas y con un kilometraje relativamente bajo. De algunas marcas, como Honda o Mash, te será posible comprar motos de segunda mano que no hayan registrado ningún uso.
Este es un segmento popular tanto para motos nuevas como de segunda mano. A partir de este presupuesto las motocicletas Harley-Davidson y BMW GS también aparecen en el mercado de segunda mano. Además, hay muchas motos deportivas de modelos recientes que también se mueven por este rango de precios, como la Suzuki GSX-R, las Yamaha R6 y R1 o la Honda CBR1000 RR Fireblade.
En este rango de precios se pueden comprar casi todas las marcas y modelos de motocicletas nuevas. Desde motos de turismo como la Suzuki DL1000 V-Strom, la Honda VFR1200, KTM 1290 Super Adventure hasta motos de lujo como la BMW R Nine T y la Ducati Monster. En este segmento también se pueden encontrar motos de lujo de segunda mano con sólo unos pocos miles de kilómetros a sus espaldas.
Este es el segmento de las motos de lujo con más opciones y accesorios incluidos en el precio. Algunos ejemplos serían la BMW K1600, la BMW R1200 GS, la Harley-Davidson Ultra Classic Electra Glide, la Ducati Multistrada o la Ducati 1200 Panigale.
Has comprado tu primer vehículo de dos ruedas y ahora eres un orgulloso propietario; ya estás fantaseando con los accesorios, indumentaria motera y casco que vas a comprar. Pero, antes de lanzarte a por los extras, ¿qué otros costes deberías tener en cuenta? En España, poseer una moto puede costar entre 600 y 2500 euros al año de media. Así que si vas a conducirla poco y la tendrás de exposición en el garaje, quizás deberías considerar la opción de alquilar una moto. No solo es más barato, sino que te permitirá acceder a un modelo distinto cada vez.
Cuando llevas una moto estás obligado a asegurarla. El coste del seguro depende de la cobertura (A terceros, A terceros ampliado o Todo riesgo), del valor de moto y tu historial como conductor.
Dado que las motos están expuestas a las inclemencias del tiempo y del terreno, al contrario que un coche, es normal que tengamos que invertir más tiempo y dinero en su mantenimiento. Este suele ser el mayor gasto extra para los propietarios de motos, especialmente si tu vehículo es antiguo. Debes contemplar un gasto de unos €300 - €800 por año.
Dependiendo del número de kilómetros que conduzcas, será necesario un mantenimiento regular: un neumático delantero nuevo después de ±10.000 km, un neumático trasero nuevo después de 8.000 km, cambio de aceite de manera regular, pastillas de freno, etc. Por lo tanto, asegúrate de reservar suficiente dinero que te permita poder llevar a cabo el mantenimiento para que tu moto esté y permanezca en óptimas condiciones.
Sin combustible, tu moto no arrancará ni te llevará a todos esos sitios con los que sueñas. A menos, por supuesto, que tengas una motocicleta eléctrica. De todas maneras, incluso las motos eléctricas necesitan una inversión constante en electricidad para funcionar. La mayoría de las motos necesitan una proporción infinitamente menor de combustible que el que requiere un coche. Míralo así: el nivel de felicidad por litro de combustible es mucho mayor con tu nueva moto.
Este no es un coste concreto que tendrás que pagar, sin embargo, el desgaste es algo a tener en cuenta. Cuanta más antigüedad tiene tu moto y cuantos más kilómetros lleva a sus espaldas, más valor pierde. Si en algún momento decides vender tu moto y ponerla en el mercado de segunda mano, el desgaste que haya sufrido será un elemento muy importante a la hora de determinar su valor. Vamos, que no podrás venderla por lo mismo que te costó ni parecido.
Además de comprar una moto debes considerar los accesorios como parte de la compra y, por tanto, contemplarlos dentro de tu presupuesto como un gasto fijo. El casco es obligatorio por ley (y, créenos, no quieres ahorrar en este tema). La ropa motera, por otro lado, no es una simple opción estética, sino parte de tu seguridad. Encima de una moto eres completamente vulnerable, tu cuerpo está expuesto y no deberías escatimar en elementos de seguridad. Asegúrate de reservar dinero para comprar un buen casco, una buena chaqueta, pantalones y botas moteras.
Las motos son un botín muy suculento para los ladrones; están a la vista, sus piezas son fáciles de desmontar y son muy fáciles de vender por separado. La mayoría de las motos no pesan tanto como para evitar que algunos ladrones las levanten y las metan directamente en una furgoneta. Por eso es importante que asegures tu moto correctamente, no solo con una cadena que bloquee ciertos elementos, sino con una alarma u otras medidas de seguridad más avanzadas.
En las grandes ciudades, la mayoría de las personas no tienen su propio patio o garaje donde estacionar sus vehículos. Por supuesto, la opción más común es estacionar tu moto en la acera. Sin embargo, si deseas guardarla de manera más segura y, a la vez, protegerla de la intemperie y del vandalismo, la opción más recomendable es alquilar un aparcamiento. Esto, por supuesto, conlleva un gasto añadido que debes contemplar en tu presupuesto de mantenimiento anual.
Como puedes ver, además de la compra de una moto, hay muchos costes que hay que tener en cuenta. Así que asegúrate de no gastar todo tu presupuesto en el vehículo, para que tengas suficiente dinero que puedas invertir en extras importantes como el casco, la ropa y el mantenimiento.
Una vez ya tienes claro tu presupuesto es el momento de determinar el resto de los requisitos. La primera elección que hay que hacer: ¿Quieres optar por una moto nueva o por una de segunda mano?
Dependiendo del presupuesto, esta elección ya estará hecha de antemano. Sin embargo, si tu monedero te permite acceder a ambas opciones, echa un ojo a nuestra lista con los pros y los contras; te ayudará a decantarte por una u otra opción con la certeza de estar tomando una buena decisión.
Al comprar una moto nueva puedes ahorrarte el escrutinarla en busca de arañazos o averías ocultas, que suelen ser comunes en anuncios de motos de segunda mano. Sin embargo, eso no quiere decir que no debas tener una actitud crítica; no todas las marcas ofrecen buenos modelos por un precio justo.
Para poder determinar si tu nueva moto cumple plenamente con tus necesidades y deseos, es importante realizar una prueba de conducción. Esto es a lo que deberías prestar atención cuando hagas una prueba de conducción:
¿Cómo se siente la moto en tus manos? ¿Es adecuada para tu tamaño corporal y para tu postura idónea? ¿La moto te da confianza? ¿Tiene un movimiento fluido y cómodo, sobretodo en curvas?
¿La moto tiene la potencia que esperas? ¿Cómo es la aceleración, el motor arranca suavemente o se siente incontrolable? Ten en cuenta que el carácter de la moto dependerá también del número de cilindros: una 4 cilindros a menudo acelera más suavemente que una 1 o 2 cilindros.
Busca un tramo con mucho espacio y prueba los frenos con distintos tipos de frenada. ¿Funciona de manera suave pero efectiva, tan pronto como has apretado el freno? ¿Cuánto tiempo tarda en parar completamente la moto?
Si tu propósito es conducir a altas velocidades (permitidas por ley) y por carreteras infinitas, la aerodinámica de la moto es esencial. En general, la resistencia de las motos es alta, por lo que tienen un coeficiente aerodinámico bastante negativo.
¿Cuál es la posición de asiento en la moto? ¿Puedes alcanzar el suelo cómodamente con los pies? Nota si tus piernas no está demasiado alzadas cuando las tienes apoyadas en el reposadero. Ten en cuenta que el tipo de motocicleta es determinante para manejar con una postura u otra; las motos deportivas y las motos de paseo son muy diferentes en términos de comodidad, pues están pensadas para usos muy diferentes. Más allá de tus gustos estéticos personales, pregúntate si el uso que le vas a dar justifica uno u otro modelo.
No importa si compras tu moto a un particular, a un distribuidor o a una tienda de motocicletas, en general las motos de segunda mano ofrecen menos accesorios y garantías que un modelo directo de fábrica. Si la moto usada que te interesa se vende a través de un concesionario o una tienda de motos, es posible que puedas optar por una garantía de 3 a 12 meses.
Sin embargo, en algunas ocasiones las motos de segunda mano tienen averías que a simple vista no pueden apreciarse y que salen a la luz después de algunos kilómetros de conducción. Algunos vendedores también utilizan trucos turbios, como invertir el kilometraje de las motos para manipular su desgaste. Antes de decidirte por un vehículo en concreto es preferible que pactes con el vendedor y lleves la moto a un taller de confianza donde puedan revisarla más minuciosamente.
El primer contacto con el vendedor debería darte confianza y ofrecerte toda la información que necesitas. Si el vendedor tiene reticencias por responder, consideralo como una mala señal.
Has encontrado una motocicleta que se ajusta a sus necesidades. Después de un primer contacto por teléfono o email, ya has recabado toda la información posible. Ahora es el momento de ir a ver la moto en vivo y en directo.
Revisa los papeles del registro (o la placa de matrícula) y comprueba si el número de bastidor se corresponde con el número de los papeles. ¿No concuerda? Déjalo inmediatamente y enfócate en buscar otra moto. ¿Es una moto de importación? Si lo es, podrás verlo en los apartados 'fecha de la primera admisión' y 'fecha de la primera admisión en España'.
Comprueba los siguientes puntos en relación al motor de una moto de segunda mano:
Motor frío: ¿Cuando has llegado para hacer la revisión de la moto, el motor estaba frío? La respuesta a esta pregunta puede ser importante, porque si el vendedor ya ha calentado el motor podría ser una señal de que hay algo que intenta ocultar.
Nivel de aceite: Gira el motor en posición vertical y comprueba el nivel de aceite (un nivel de aceite demasiado bajo indica, a menudo, un mantenimiento deficiente). Comprueba el color del aceite y que no haya un lodo de ‘moco’ en él.
Daños: Comprueba si hay daños visibles en las palancas o en la carrocería que hayan podido ser provocados por una caída.
Neumáticos: ¿Los neumáticos están suficientemente perfilados y desgastados uniformemente? Comprueba también la antigüedad a través del código de puntos. Si los neumáticos son demasiado viejos existe un mayor riesgo de reventón; tener que cambiarlos supone un gasto extra que es mejor prever antes de comprar la moto.
Cadena y ruedas dentadas: ¿Los dientes todavía son puntiagudos o son tipo aletas de tiburón? ¿La cadena de acero inoxidable tiene dobleces?
Frenos de disco: Los frenos de disco deberían ser tan gruesos por dentro como por fuera y notarse suaves. Si no lo son, significa que se están gastando. Comprueba las ruedas para ver si los bloques son lo suficientemente gruesos. Aprieta el freno delantero mientras está en marcha el motor y presiona la suspensión delantera; si los amortiguadores pierden aceite, los anillos retenedores se escaparán. Comprueba el recorrido de las manetas del freno.
Mientras haces una prueba de conducción de la moto que quieres comprar, comprueba los siguientes puntos:
General: Cuando vamos a comprar una moto de segunda mano solo tenemos una única prueba de conducción. ¡Aprovéchala para subir las revoluciones, hacer golpes de velocidad, frenar fuerte y cambiar unas cuantas veces entre las marchas. El resultado de tus pruebas debería darte una impresión amplia del modelo y del estado actual de la moto.
Embrague: Aumenta las revoluciones y comprueba si el embrague patina; si es así tendrías que reemplazar los platos, por lo que deberías contar con un gasto extra.
Frenos: ¿Los frenos funcionan inmediatamente? ¿La frenada es suave o brusca? Si al frenar sientes una especie de golpe puede ser una señal de que los discos están curvados.
Sonido del motor: Esta es siempre una parte difícil de juzgar. Cada moto tiene un sonido característico, aunque este debería poder diferenciarse de los ruidos que indican algún defecto, como un sonido parecido al de un sonajero o ruidos parecidos a un golpe.
Electrónica: Para comprobar la electrónica de la moto acuérdate de revisar elementos como las luces intermitentes, las luces largas, etc. Si fuera posible, también comprueba que el sensor de la gasolina y del aceite funcionan correctamente.
Suspensión y manejo: Observa el comportamiento de la moto en curvas cerradas y también en rectas a altas velocidades.
Fugas: Durante la prueba de manejo detente en algún momento para verificar que el motor no está teniendo fugas.
Hay varias razones para comprar una moto en el extranjero. Las más comunes son porque su precio es más barato, o porque ese modelo no se vende en España. Si es tu caso y quieres comprar una moto en otro país, ten en cuenta que no puedes simplemente conducirla hasta España sin hacer ningún otro trámite. Importar una moto tiene algunos costes extra asociados, lo que podría aumentar el precio final.
Para importar una motocicleta comprada en el extranjero a España deberías empezar por verificar su contraseña de homologación. Si la moto fue fabricada con anterioridad a la Constitución de la Unión Europea, es posible que no tenga una contraseña de homologación adecuada. En este caso, deberás llevarla a un taller de homologación para que le asocien una. Si la moto ya tiene una contraseña de homologación europea simplemente deberás acudir a una sede de la DGT con toda la documentación de la moto para hacer el cambio de registro.
Si compras la moto a una empresa de la Unión Europea deberás abonar el IVA, siempre que la moto no supere los 6000 km o que tenga menos de 6 meses de antigüedad. Si compras la moto a un particular no deberás abonar el IVA, pero sí hacerte cargo del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales. Este impuesto varía según las comunidades autónomas, y puede ascender entre un 4% y un 5% del valor de la moto.
A efectos del IVA, puede valer la pena conducir la moto unos kilómetros más antes de traerla y registrarla en España.
Algunas personas no quieren ni pueden comprar una motocicleta, pero aún así les gustaría disfrutar conduciendo una de vez en cuando. Además de comprar y tener una moto propia, existen otras alternativas para vivir experiencias moteras siempre que lo desees.
¿Quieres conducir una moto, pero no quieres pagar todos los gastos que conlleva ser propietario? Alquila una moto por sólo una fracción de estos costes. De esta forma, podrás seguir disfrutando del placer que ofrece el motociclismo sin los inconvenientes de poseer una motocicleta.
El concepto de un coche de alquiler es bien conocido, pero pocas personas saben que también es posible alquilar motos entre particulares o a empresas especializadas. Con MotoShare, el alquiler de motos ha entrado en una nueva dimensión.
¡Puedes alquilar una moto por menos de 50 euros al día!
La elección de una primera moto es un paso importante. Es probable que tu primera moto coincida con tu recién estrenada licencia de conducción. O quizás hace años que conduces, pero aún no te habías decidido a lanzarte de lleno a este nuevo y apasionante hobby que es el motociclismo. Tu primera moto es la que te adentrará en el curioso mundo del tráfico, te llevará por las rutas moteras que siempre quisiste recorrer y te acompañará, quizás, en tu día a día. Sin duda, tu primera moto debería ser un vehículo agradable y cómodo de conducir. Cuanto más la conduzcas, más control tendrás sobre ella.
Desde que empezó tu afición por las motos has soñado con tener una BMW o una Harley-Davidson. Sin embargo, no siempre se puede o se debería comprar la moto de tus sueños cuando se trata de tu primera moto. Los moteros principiantes que inmediatamente van a por la moto más bonita o la más cara, a menudo hacen que la situación se les vuelva en contra. Tu primera moto debería ser muy sencilla de conducir. Si la moto de tus sueños es incómoda o difícil de manejar, entonces seguramente no sea la mejor opción. Créenos, la diversión y las sensaciones de conducir una moto que se adapta a ti como un guante superan con creces el hecho de conducir una moto aparentemente bonita. Si no estás seguro de qué moto se adaptará a tus necesidades, siempre puedes alquilar varios modelos diferentes para hacer pruebas de conducción durante unos días.
Ante todo, tu primera moto debería ser lo suficientemente liviana como para que sientas que tú la controlas a ella, y no al contrario. Si estás aprendiendo a conducir ten en cuenta que podría ocurrir que tu moto se caiga en alguna ocasión o que se rasguñe. Por eso, tienes que pensar si quieres comprar un vehículo nuevo o más bien uno de segunda mano, hasta que te sientas 100% cómodo. La moto de tus sueños será aquella que te lleve donde tú necesitas ir.
¿Será una moto montañera o un monstruo de carreras? ¿Una sencilla scooter de ciudad o una custom que llame descaradamente la atención? Si estás buscando la moto ideal que mejor se adapte a tus necesidades, hay 3 criterios a tener en cuenta:
Para poder conducir algunos tipos de motos se necesita una licencia especial. Existen cuatro tipos de permisos de conducir específicos para ciclomotores y motocicletas en nuestro país: AM, A1, A2 y A. La potencia del motor determina el tipo de permiso que necesitarás:
Elegir una moto adecuada no es sólo cuestión de gustos. Asegúrate de que el modelo que elijas sea adecuado a tu estatura. Especialmente si estás planeando hacer rutas más largas; será esencial que lleves una postura adecuada encima de la moto, es decir, con la espalda recta.
Con una buena posición sentada también tendrás más visión de conjunto de la carretera y podrás mantener el vehículo bajo control en cualquier circunstancia. La página web cycle-ergo.com es un buen recurso para buscar modelos adecuados para tu estatura. Elige un modelo de moto; a continuación, indica tu longitud y la longitud de la parte interior de tu pierna (entrepierna). La página te mostrará cómo es tu posición sentada para el modelo de moto que elegiste. ¡Muy útil!
Por supuesto, el motociclismo es más que el tamaño, la potencia, la comodidad y el manejo de una moto. Quieres montar en una que se adapte a tu personalidad y a tu comportamiento. ¿Qué vas a hacer con tu moto? ¿La usarás solo para ir al trabajo o viajarás con ella, especialmente cuando haga buen tiempo? ¿Quieres impresionar cuando aceleras, conducir a altas velocidades por la autopista? ¿O buscas una moto que pueda con cualquier terreno? ¿Llevarás a alguien en la parte de atrás o generalmente irás solo?
Hay muchos tipos de motos para elegir. ¿Será un Tour, Toursport, Sport, Naked, Super-Motard, Cruiser, Chopper, Cafe racer o Motorscooter?
Si has leído paso a paso los puntos anteriores, seguramente ya tienes una mejor idea del tipo de moto que se adapta a tus necesidades. Es la hora de probarla y comprobar si es cierto. Sin embargo, una sola prueba de 30-60 minutos no suele ser suficiente, especialmente si has conducido pocas motos en tu vida. Es probable que, a primeras, todas las motos te parezcan bien; cuando vas a comprarte una moto es muy normal que la emoción te gane.
Antes de decidirte deberías ir más allá: ¿la moto seguirá siendo lo suficientemente buena después de conducir durante 3 horas seguidas? ¿esta molestia que sientes ahora en las rodillas, en la espalda o en las muñecas… desaparecerá por arte de magia? Nuestra recomendación es que elijas las 3 motos que están entre tus opciones y que las [alquiles una a una durante un par de días.
No te quedes solo en tu zona, recorre 300 km con ellas y te harás una idea clara de cuál es para ti. MotoShare es la plataforma de referencia para el alquiler de motos.
En MotoShare, además de distribuidores y tiendas pequeñas, también los propietarios particulares de motos pueden alquilar su motocicleta. Esto hace que los precios sean mucho más baratos y que haya una amplia gama de motos de toooodo tipo. Lo más probable es que la moto que estás pensando en comprar esté en alquiler a través de MotoShare.
Puedes aprovechar el alquiler para para hablar con el propietario y preguntarle todo lo relacionado con su moto. Consulta aquí la oferta actual de motocicletas en alquiler a través de MotoShare.
Hay diferentes tipos de motociclistas. Uno monta sólo cuando el suelo está seco y el sol brilla; otro va con la moto a pasear haga el tiempo que haga, a través del viento, la nieve y la niebla. Algunos la necesitan para ir al trabajo; otros quieren hacer rutas remotas hasta destinos lejanos. Por eso es importante considerar de antemano para qué vas a utilizar la moto y con qué frecuencia.
Motociclista de placer: El motociclista de placer hace su kilometraje principalmente en buenas condiciones climáticas y en rutas cercanas. Estos paseos a menudo se realizan en carreteras y caminos bien asfaltados. Como su rutina incluye pocos kilómetros de conducción y no se mete en terrenos complicados, el motociclista de placer puede elegir casi cualquier tipo de moto.
El motociclista de vacaciones: El motociclista de vacaciones recorre millas en muchas circunstancias diferentes, pues suele elegir rutas largas y destinos lejanos, donde el clima es difícilmente controlable una vez ya estás embarcado.
En estas rutas, el motociclista de vacaciones recorre muchos kilómetros en carretera, pero también debe estar preparado para caminos, digamos, más rústicos... Para que su moto esté preparada para afrontar estas condiciones, es recomendable elegir una todoterreno, tour, toursport o crucero. Estas motos suelen ofrecer mucha comodidad, una posición de sentado agradable y mucho espacio para el equipaje.
Es importante que este tipo de moto sea asequible en su mantenimiento y que no consuma demasiado combustible. Es por eso que la elección a menudo recae en una moto todo terreno o de paseo. Se debería priorizar una con un peso ligero.
Las opiniones sobre las marcas de motos son muy personales. Probablemente no haya un tema que suscite más discusión cuando alguien pregunta: ¿Cuál es la `mejor' marca de motos?
Cada marca tiene sus partidarios y oponentes:
Al final, la elección depende totalmente de los deseos y requisitos que has determinado para tu moto. Dependiendo de tu estilo de conducción, del presupuesto, de tu entorno, etc., probablemente tendrás preferencia de antemano por una marca u otra marca.
El presupuesto será, por supuesto, un factor importante a la hora de elegir una u otra marca. Lo más importante es que te sientas completamente a gusto con la moto de tu elección, independientemente de la marca.
Por eso es mejor probar diferentes modelos y marcas, alquilando una moto por un fin de semana o un día entero y recorriendo muchos kilómetros con ella. Con la experiencia, sabrás mejor que nadie lo que te conviene y evitarás una decisión equivocada.
Dependiendo de la categoría de tu licencia de conducir tendrás un límite en el tipo de moto que puedes comprar. Desde noviembre de 2014 hay tres categorías diferentes de permisos de conducción de motocicletas:
No tienes licencia de motociclista, pero aún así quieres comprar una moto. ¡Sin problemas! Es más, actualmente incluso puedes asegurar una moto sin tener permiso de conducir.
Esto puede parecer obvio, pero no está de más recordarlo: aunque puedas comprar una moto sin tener licencia, no podrás conducirla.
Las sanciones administrativas por conducir sin carnet pueden ascender hasta los 500 euros.
Además, es un delito tipificado en el Código Penal. Aunque pueda parecer una locura que pocas personas cometen, aproximadamente unas 20.000 personas son multadas al año por conducir sin licencia.
Aunque no tengas el carnet específico para motos, puedes conducir una de hasta 125 cc con tu carnet de coche, siempre que supere los tres años de antiguedad.
Si vas a comprar la moto en un taller o en un concesionario puede ser útil hacerlo cerca de tu casa. Siempre que haya algún problema con la moto podrás devolverla fácilmente o acercarla para que la revisen en el propio taller donde te la vendieron. Sin embargo, si la compras de segunda mano y sin garantía, comprarla en tu misma zona deja de tener tanto sentido.
¿Por qué iba a comprarme una moto en la otra punta del país?, te preguntarás. La respuesta es que es muy fácil que encuentres una buena oferta en otra región. Si estás dispuesto a viajar puedes ahorrar cientos de euros en la compra de tu moto.
Estos mismos euros que has ahorrado te irán bien para comprarte el casco o accesorios para tu moto. Así que, si estabas limitando tus búsquedas en el portal de venta de motos, elimina el filtro de la zona y déjate seducir por todas las ofertas disponibles.
Hay varios sitios web donde se anuncian motos nuevas o de segunda mano. La clave está en elegir un par de ellos para no perderte las ofertas que los usuarios ponen en una u otra web. Si quieres encontrar las mejores motos en venta, estas páginas que compartimos aquí deberían estar en los favoritos de tu navegador:
Motos.coches.net: Coches.net es uno de los mayores sitios web relacionados con el mundo del motor en España. En este portal se publican noticias, comparativas, estudios y todo tipo de artículos relacionados con los coches y las motos. Pero, sobretodo, se publican miles y miles de motos nuevas y de segunda mano. La comunidad es muy activa y es un sitio web útil para orientarse y asesorarse. Sus filtros de búsqueda son una maravilla.
Milanuncios: Probablemente el sitio web de compra y venta de segunda mano más antiguo de España. Tanto distribuidores como particulares publican sus anuncios de motos aquí, que conviven con anuncios de todo tipo de objetos de segunda mano.
Wallapop: Esta app de compra venta de objetos de segunda mano introdujo hace poco una sección de motor, en la que hay unos cuantos anuncios de moto publicados. La oferta es mucho menor que en webs como motos.coches.net, y las posibilidades de filtrado son más limitadas. Sin embargo, esta app es mucho más útil si buscas una moto cerca de ti.
Facebook: Puede que no lo creas, pero Facebook se usa cada vez más para vender cosas de segunda mano. Hay varios grupos específicos para vender y comprar motos. Al poder ver directamente el perfil del vendedor, esto da un plus de confianza.
Además de los sitios web anteriores, también puedes visitar las páginas web de tiendas y talleres de motos especializados. Normalmente la oferta que tienen es mucho más limitada, pero si sabes exactamente lo que estás buscando pueden ayudarte a encontrar ese modelo en concreto o asesorarte con otras opciones.
Puedes comprar una moto a muchos proveedores diferentes. Nueva o de segunda mano, en una tienda de motos o a un particular. ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de los diferentes proveedores?
Tiendas y concesionarios: Mucha gente elige comprar una moto en un concesionario o una tienda de motos. Es tan sencillo como entrar, escuchar lo que el vendedor tiene que decir sobre cada moto y elegir una. Las tiendas suelen inspirar confianza porque sentimos que estamos tratando con un especialista. Añade a este factor el hecho de que la mayoría de las tiendas te dan un mínimo de 3 meses de garantía. Es lógico que muchas personas elijan comprar sus vehículos aquí. Es probable, sin embargo, que la moto te cueste un poco más en la tienda que en un portal de internet (lógico, hay gastos y también muchos valores añadidos). Sin embargo, no te fíes porque sí de cualquier tienda; no todas son justas con el precio ni con el trato al cliente. Sé crítico e infórmate con las opiniones de otros clientes.
Particulares: Debido a la popularidad de sitios web como motos.coches.net, cada vez más gente compra motos a particulares. A menudo es más barato comprar a un particular que a un distribuidor o una tienda. Sin embargo, corres más riesgo, porque una persona particular no te puede ofrecer una garantía ni tampoco tiene una reputación que mantener si vende sus productos escondida bajo un perfil anónimo de internet.
La principal razón por la que muchas personas optan por comprar su moto a una empresa o profesional es que estos suelen ofrecer una garantía. La garantía es un derecho regulado por ley que asegura a los consumidores en aquellos casos en los que no están conformes con el producto adquirido o cuando el servicio o producto no es conforme al contrato de compraventa.
La ley de garantías se aplica a cualquier producto, nuevo o usado, aunque su compra debe estar regulada por contrato. En el caso de las motos nuevas, la garantía se suele extender hasta los dos años. Las motos de segunda mano con garantía suelen ofrecer solo 1 año de cobertura.te o importador cuando le sea difícil o imposible dirigirse al vendedor.
Has encontrado la moto que se adapta a tus necesidades, pero ¿cómo vas a pagarla? Hay varias maneras de financiar una moto:
Esta es probablemente la opción más obvia. La mayoría de las personas ahorran hasta que tienen suficiente dinero para comprar una motocicleta.
Esta es una opción que ofrecen muchas tiendas de motos y algunos bancos, el pago a plazos o una especie de microcrédito. Ten en cuenta que esta opción de pago implica intereses. Tu presupuesto, por tanto, se incrementará según las condiciones, generalmente entre un 2% y un 25%.
Además de las tiendas, algunas entidades ofrecen préstamos para pagar la moto a plazos. En esta web puedes encontrar algunas opciones
Has llegado a un acuerdo con el vendedor sobre el precio de la moto. Te ha explicado todos los pormenores de su historial. Ya estás listo para pagar y registrar la moto a tu nombre.
Es importante que el pago se haga de manera electrónica para que tengas una prueba de la transacción. También es recomendable firmar un contrato de compra-venta.
Debes abonar el Impuesto de Circulación o, en caso de que la moto estuviera parada, darla de alta primero. También tienes que pagar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (entre un 6 y un 8% dependiendo de la Comunidad Autónoma) en Hacienda (modelo 620) y conservar el comprobante.
Si la moto tiene más de 3 años (4 años si se trata de un ciclomotor) deberás tener la ITV al corriente.
Para hacer el cambio de nombre deberás contar con una fotocopia del DNI del vendedor, así como su firma en el impreso de solicitud de la DGT. No es necesario que él esté presente.
El cambio de nombre varía de precio según si se trata de una motocicleta (53,40 euros) o un ciclomotor (26,70 euros) - 2019.
Para hacer el cambio de nombre o cambio de titularidad deberás dirigirte a la DGT y aportar todos esos documentos que hemos listado:
Una vez hayas hecho el cambio de nombre, no olvides asegurar la moto.
Por fin tienes la moto que se ajusta a tus deseos y necesidades, pero ¿dónde vas a aparcarla? ¿Tienes tu propio garaje o patio, vas a alquilar una plaza de parking, o vas a aparcar la moto en la acera?
Si tienes tu propio garaje eres afortunado; tu moto está protegida y resguardada, no te conlleva un gasto extra y tu seguro, con mucha probabilidad, tendrá esto en cuenta a la hora de cubrir ciertos daños.
¿No tienes tu propio espacio, pero no quieres dejar tu bicicleta fuera? En este caso, puedes alquilar una plaza de parking. Puedes encontrar aparcamientos tanto en edificios de viviendas como en parkings profesionales. Hay empresas que ofrecen plazas de aparcamientos con extras, como acceso a electricidad o agua.
Esta es la opción a la que recurren más moteros, básicamente por falta de espacio propio o por falta de presupuesto. No es mala opción si vives en una zona segura y, especialmente, si inviertes en candados y protecciones de alta calidad. Es probable, sin embargo, que tu seguro tenga esto en cuenta a la hora de valorar tu póliza.
¿Has completado todos los pasos de nuestro artículo? Te garantizamos que estás totalmente preparado para tener tu propia moto y evitar una mala compra. Tener una moto no es solo cuestión de ser propietario; es la puerta de entrada para realizar rutas increíbles y para conducir con la sensación de libertad tan anhelada por los moteros. ¿Quieres ser uno de ellos?
Quieres saber cómo es conducir una moto allroad, chooper, naked o una tourer? Elige tu propio estilo o prueba algo nuevo.